domingo, 2 de enero de 2011

Pueblos Blancos: Vejer de la Frontera

En Cádiz hay una ruta turística llamada "Ruta de los pueblos blancos" en la que no se incluye (por razones geográficas) a Vejer de la Frontera, pueblo blanco donde los haya. En octubre pasado hicimos una excursión a este encantador pueblo de la comarca de la Janda, básicamente a comer carne de retinto, exquisita carne de una ternera de raza autóctona. Lógicamente dimos un paseo por el pueblo, que ya conocemos de otras muchas excursiones, pues está a poco más de 60 Km de Jerez, por una carretera donde se pueden admirar hermosos ejemplares de toros bravos (y ver de lejos la finca "Cantora", de la Pantoja. Esto como una frívola nota rosa...).
Tuve la suerte de que me presentaran a su Alcalde (Antonio J. Verdú) y aproveché la ocasión para felicitarle por haber logrado un pueblo no sólo limpio, sino más bien impecable. Y me respondió: "El Ayuntamiento da prioridad máxima a la limpieza y al orden público. Y los vecinos colaboran con entusiasmo en mantenerlo limpio". Y reluciente, diría yo.
Y añado: Que cunda el ejemplo. He creado un álbum en Facebook con unas cuantas fotos de este precioso pueblo. Tienes que anotarlo en tu agenda para visitarlo en la primera ocasión que tengas.
El enlace: Fotos de Vejer

2 comentarios:

Víctor dijo...

Preciosas las fotos del album, Civilis. La de los pueblos blancos de Cádiz es una ruta que llevo tiempo deseando hacer, y esta entrada me recuerda ese viaje pendiente. Desconocía el interesante dato del "retinto", gracias por la información.

Conozco algunos pueblos blancos de Córdoba, y siempre me ha llamado la atención su absoluta limpieza, lo mismo que destacas tú. Dirían que más que "limpios", están "fregados".. cada ama de casa (no "los amos de casa", desde luego) se preocupa de que el trocito de la vía pública adyacente a su casa en encuentre tan limpio como el salón.

Un abrazo

Unknown dijo...

Efectivamente. Si paseas por Arcos, por Vejer, o por cualquiera de los pueblos blanco (en primavera, principalmente) será muy normal ver a las mujeres encalar sus fachadas. En calles estrechas y sin tráfico suelen también limpiar "su parte", la que corresponde a su fachada. Así consiguen tener los pueblos como los tienen (como los chorros del oro), y sin castigar a las arcas municipales. En el cuadro, como bien dices, faltan los "amos de casa". Bueno, pensemos que se dedican a otras labores. Hay que ser bien pensados. Un abrazo.