jueves, 30 de julio de 2009

Inaugurar una calle

El Hombre de Atapuerca fue el último que, pasando por la calle Collantes de nuestro pueblo, dejó colocadas unas cuantas piedras por el suelo para aliviar el camino de los paseantes. Desde entonces (¿medio millón de años?) esta calle no ha sabido lo que es una obra a pesar de que era más que evidente la falta que le hacía.

La verdad es que ha quedado muy bien. La pena es que no se haya convertido en peatonal: por ahora no hay ninguna prohibición al paso de coches, a pesar de haber eliminado las aceras, lo que aumenta, en cierta medida, el peligro para los peatones.


Nuestra Alcaldesa (Pilar Sánchez, del PSOE) fue el pasado miércoles a inaugurar la obra. Con un poco de retraso sobre el horario previsto (alrededor de una hora) pudo charlar con alguna vecina de esta calle que, aunque contenta por el arreglo, desconfiaba de su conservación, tal y como está en estos momentos, y ello debido a una macro-discoteca (con un aforo superior al del teatro Villamarta) abierta en calle Zaragoza con salida también a esta calle Collantes. Por lo visto el tráfico, el ruido y la suciedad que genera este local (parece ser que su apertura es de dudosa legalidad) son tremendos.


Pilar Sánchez respondió a la vecina lo poco que podía hacer al respecto, comentando que cuando se dio la licencia de obras a esta discoteca ella no era todavía Alcaldesa. Pero prometió que la policía local haría una ronda por esta calle a las tres de la mañana, para mantener el orden.

Respecto a la concesión de la licencia de obras tengo que comentar que Pilar tomó las riendas de la Ciudad el 14 de enero de 2005. Y la licencia de obras se concedió el 1 de agosto de ese mismo año.




Es penoso ver cómo la propia empresa constructora tapó con pintura la palabra 'DISCOTECA', para evitar "espantar" a los posibles compradores de pisos en un bloque que estaba en construcción justo enfrente de la obra de la super-mega-guay-disco-ossea. O sea, se conceden licencias de obras tanto para un bloque de pisos como para una macro-discoteca en una calle cuya anchura dudo mucho que sobrepase los seis metros en el punto que estamos hablando. Y soportando un tráfico de coches tremendo para el ancho que tiene. Qué raro que se parara la obra de la disco mientras estuvo abierta la promoción de venta de pisos...




Dicen que por dentro es muy bonita la disco, aunque gustos hay para todos. Lo que me parece una verdadera chapuza (y lo que es peor, un verdadero peligro de electrocución para los peatones) es el cable eléctrico que sacan cada vez que se abre la dichosa super-macro para dar luz a unas lámparas que colocan sobre la calzada con unos maceteros y una alfombra roja (¿para el famoseo?) No se aprecia bien en la foto, pero el cable está pegado con cinta adhesiva de hacer paquetes. Y tiene un enganche con cinta aislante. El que se atreva a pasar por esa acera, lleva todas las papeletas para meterse un buen paquete de amperios en el cuerpo (bromas aparte, con este montaje hay peligro de muerte, y esto va en serio).








Aquí planteo una conclusión: El adecentar es una condición necesaria para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía, pero no es suficiente. El velar que se cumpla con la legalidad vigente podría ser condición suficiente. Por ejemplo, ¿saben los conductores de ese coche y esa moto que no deben aparcar en la acera? ¿No habrán visto que están impidiendo el paso de los peatones? ¿No se merecen que viniera la grúa y se llevara los dos vehículos? Pues esto no se hace nunca.


¡Ah! Una pregunta: ¿Cuántas papeleras han colocado en la calle recién modelada? Si vives en Jerez pásate por ella. Si no, examina la primera foto. ¿Son las papeleras responsabilidad de Medio Ambiente? Pues habría que darle un buen tirón de orejas.

1 comentario:

Alfonso Saborido dijo...

Te vas a convertir en el terror de las calles jajajaaj, van a verte con tu supercámara y temblará Roma y Santiago :-P